Por Ramón Núñez Ramírez
El Plan Nacional Plurianual del Sector Público (PNPSP), desarrollado por el Ministerio de Economía y aprobado por el Consejo de Gobierno, representa un esfuerzo teórico interesante para definir las políticas públicas en los próximos cuatro años, planificar las inversiones para que impacten en las prioridades establecidas por el Gobierno, sin embargo en un ambiente global de volatilidad en ciertos precios resulta difícil se cumplan todas las metas del plan.
El PNPSP parte de cuatro marcos: el normativo, metodológico, macroeconómico y fiscal, y el plurianual de inversión pública 2021-2024. Un elemento importante es que está alineado con los objetivos de Desarrollo Sostenible 2030, aprobado por la Asamblea de la ONU en 2015, la Estrategia Nacional de Desarrollo y el Programa de Gobierno del PRM.
Las políticas priorizadas son 33, dentro de las cuales hay 32 identificando el problema y culmina en los resultados, indicadores y metas esperadas, para no aburrir al lector con los pasos intermedios, y en la mayoría de las prioridades debe intervenir la inversión pública. La #33 no se desarrolla porque es competencia del Banco Central.
Una de las debilidades de trabajos como este descansa en los supuestos del Marco Económico y Fiscal, algunos de los cuales son exógenos, es decir no dependen de las políticas públicas, como los precios de los combustibles, de nuestras exportaciones minerales y de otras variables.
Para tener una idea de lo que planteamos baste señalar que en el caso del petróleo West Texas Intermediate (WTI) los supuestos para 2021 eran de un barril a US$61.9 y para 2022 de US$56.7, sin embargo al 5 de octubre en los mercados mundiales se cotizaba a US$78.93 y los pronósticos es que dicho precio aumente en la medida de la recuperación mundial.
En el caso del carbón mineral, el combustible de Punta Catalina más dos plantas privadas, los supuestos eran de un precio por tonelada métrica de US$78.0 en 2021 y US$76.1 en 2022, sin embargo los precios se han disparado y al 5 de octubre cerraron a US$267.
Los precios del carbón se han incrementado por un aumento de la demanda frente a una oferta reducida por el cierre de minas en vista de que la tendencia era prescindir de este combustible tan contaminante y este aumento de los precios y medidas medioambientales en China han provocado apagones en hogares e industrias. Es difícil predecir cuando los precios del carbón se reduzcan a los niveles de los supuestos.
Estas alzas, sin mencionar la del gas natural, afectarían las finanzas públicas por la vía del aumento del subsidio a la electricidad y lo que significará en materia de erogaciones adicionales de divisas.
La actual volatilidad de precios de los combustibles, fletes y alimentos representa otro reto para la sostenibilidad de la política fiscal sin reforma.
Planificar las inversiones para que impacten en las prioridades
Precios carbón se han incrementado por un aumento de la demanda
Los precios se han disparado y al 5 de octubre cerraron a US$267.
(Publicado originalmente por el Periódico Hoy)